Está llegando a España un número importante de refugiados procedentes de Ucrania, que en gran medida son niños y adolescentes. Es probable que, en caso de precisar atención médica, los Servicios de Urgencias hospitalarios sean en la mayoría de los casos el primer sitio al que acudan hasta que puedan regularizar su situación
Es importante que los pediatras de dichos servicios sean conocedores del calendario vacunal infantil ucraniano, que presenta algunas diferencias con el español, para una óptima atención de dichos pacientes. El calendario ucraniano incluye las vacunaciones frente a tuberculosis, hepatitis B, difteria, tétanos, tosferina, poliomielitis, Haemophilus influenzae tipo b (Hib), sarampión, rubeola y parotiditis, así como también la vacuna de la gripe en niños con factores de riesgo. Sin embargo, no contempla la vacunación frente a Streptococcus pneumoniae, Neisseria meningitidis, varicela y virus del papiloma humano (VPH). Además, según datos de 2020 las coberturas vacunales son subóptimas (alrededor del 70-85%) y ampliamente variables según las provincias, lo que enfatiza la importancia no sólo de conocer el calendario vacunal sino de confirmar en cada paciente que lo tiene al día. Respecto a la vacunación frente a la COVID, según las últimas estimaciones de 2022, solo el 35 % de la población por encima de los 12 años habría completado la pauta vacunal de 2 dosis y los niños de 5 a 11 años no han sido vacunados.
Cabe destacar que la falta de vacunación contra S. pneumoniae y N. meningitidis cobra especial relevancia en la evaluación del lactante con fiebre sin foco, uno de los principales motivos de consulta en los Servicios de Urgencias. La ausencia de protección contra estos dos microorganismos, principales agentes causales de sepsis y meningitis, obliga a un manejo más cauto de estos pacientes y puede conllevar la realización de más exploraciones complementarias e indicación de tratamiento antibiótico. En concreto, el algoritmo de manejo del lactante de 3-24 meses con fiebre sin foco de la SEUP, recomienda la realización de analítica sanguínea para descartar una bacteriemia oculta en aquellos pacientes con una Tª > 39’5ºC si no están inmunizados frente a H. influenzae o a S. pneumoniae. Por otra parte, la no vacunación frente a N. meningitidis puede afectar al manejo de un paciente con fiebre y petequias y en la probabilidad de que éste presente una meningococemia. En nuestro medio, con la cobertura vacunal que tenemos, la meningococemia es inferior al 1% en pacientes con fiebre, petequias y TEP normal, pero es esperable que este porcentaje sea superior en poblaciones no vacunadas. Además, dada la situación de vulnerabilidad de estos pacientes y sus familias, es imprescindible asegurar un correcto seguimiento de aquellos a los que se indique manejo ambulatorio.
Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas de SEUP